Llegando al siguiente punto en la serie de artículos “Cómo aprender marketing”, en esta ocasión se trata de definir los objetivos, y me encanta. Me motiva la profundidad de determinarlos pues nos adentramos en preguntas como ¿quién quiero ser?, ¿qué quiero lograr?

Conocer quién deseo ser como persona, cuál es mi objetivo, ofrece claridad. Lo mismo sucede en los negocios, en los proyectos: ¿a dónde quiero llegar? Vamos a ver.

Cómo definir los objetivos de una empresa

No pretendemos alcanzar múltiples objetivos en una sola etapa, pues sería frustrante sentir que seguimos lejos, por eso: foco. Necesitamos enfocarnos en uno o dos objetivos que serán nuestra guía en este proceso de transformación.

Esta es una pequeña guía sobre lo que revisaremos a continuación:

Primero: encontrar qué quiero conseguir.

Si contamos con una fotografía global de en dónde nos encontramos, cuáles retos enfrentamos (internos o externos) y qué necesitan nuestros clientes, tendremos una herramienta poderosa por medio de la cual interpretaremos el rumbo que hay que tomar. Lo imagino como un gran mapa mental en donde se pueden interconectar los temas, sobresaliendo aquellos que se repiten con mayor frecuencia o que tienen más conexiones. Analiza los elementos que lo conforman para llegar a una conclusión.

Así, el primer paso sería encontrar el qué: ¿qué quiero conseguir en este periodo?

Nota:es muy importante evitar las métricas de vanidad. Se trata de aquellos indicadores que nos distraen de lo verdaderamente importante, por ejemplo, número de likes en una publicación.

Segundo: volverlo medible.

Para encontrar una métrica viable tenemos algunas opciones:

1. Revisar nuestros datos históricos y hacer una proyección.
2. Investigar estadísticas aplicables a nuestro negocio.
3. Realizar cálculos vinculados con el retorno de la inversión.

Dentro de lo medible se encuentra definir el periodo en el que trabajaremos por alcanzar este objetivo (¿semanal, mensual, trimestral, anual?). Los periodos cortos son más sencillos de controlar, por lo cual un objetivo a mediano plazo suele componerse de metas. De esta manera, el seguimiento nos indicará si vamos por buen camino o si hay que tomar otra acción para llegar a ese objetivo.

Tercero: asegurar que sea alcanzable.

Nuestros objetivos deberán de tener una característica esencial y se trata de ser alcanzables.

Así como puede desmotivarnos buscar cinco objetivos a la vez, también lo será plantearnos metas muy altas o que estén fuera del alcance de nuestros recursos (económicos, humanos, temporales…). Salir de la zona de confort es un reto interesante, siempre y cuando nos de la sensación de que podremos llegar a él, de lo contrario, generaríamos el efecto inverso tanto en uno mismo, como en el equipo de colaboradores.

Cuarto: identificar los obstáculos.

Es muy saludable desde un inicio estar preparados para algunas dificultades. Somos humanos, aquí entran factores de conocimientos, habilidades y mentalidad; además nos encontramos en un entorno cambiante, lleno de variables que impactarán en nuestra estrategia, algunas de las cuales son imposibles de prevenir ni controlar.

Imaginar un par de escenarios futuros ayudará a poner sobre la mesa objetivos más conscientes, ¡pero cuidado! no caigas en la trampa de pensar en negativo y buscar posibles problemáticas, esto solo te distraería del resultado ideal.

[Un paréntesis para los indicadores]

Mientras escribía este artículo, me he topado con una lista de Indicadores Clave de Desempeño para Marketing creada por SEMRush (herramienta online para marketing digital, principalmente SEO). Es una lista amplia, que 1) nos da muchísima claridad al momento de elegir objetivos y 2) nos puede confundir de forma proporcional si no sabemos cuáles indicadores elegir y por qué.

El punto 7 en nuestra Guía Básica de Marketing para Emprendedores nos pide monitorear los indicadores clave, por lo cual no demoraré mucho en este punto, pero sí me interesaba mencionar que los objetivos vienen de la mano con los indicadores.

Lo visualizo así: si el objetivo es el norte, la estrategia es el camino, y los indicadores son los señalamientos que nos dicen si vamos bien o si necesitamos revisar la ruta.

Volviendo a definir los objetivos…

Cuando el proceso de alcanzar los objetivos incluya a otros colaboradores, invítalos a participar en su definición. Te brindará una visión más global, sobre todo de quienes se encargarán de hacerlos realidad en el día a día, además de que estarás otorgando un lugar especial a sus conocimientos y se sentirán más involucrados.

Si tu negocio o proyecto fuera una persona, ¿en quién desearías que se haya transformado al final del periodo? ¿Cuáles otros métodos utilizas para determinar un objetivo?

[Tomar un respiro… para mí misma]

Tomar un respiro para mí misma. Así ha sido este tiempo. Ha pasado casi diez meses (Dios mío, casi diez meses) desde que escribí por última vez en mi querido blog.

Estos meses han sido todo un proceso, un fuerte avance en mi camino personal y profesional, lleno de retos interiores caracterizados por el enfoque en conocerme mejor a mí misma, reafirmar lecciones que aún necesitaba terminar de aprender y comprender mejor cómo puedo alinear mis objetivos personales y profesionales.

¿Quién soy? ¿quién quiero ser? ¿cómo equilibraré lo personal con lo profesional? ¿qué tan cerca deseo que se encuentren estos dos mundos? ¿qué tan cerca necesito que estén?

Soy una persona altamente cuestionadora… yo funciono haciéndome preguntas y así puedo avanzar mientras busco las respuestas…

He progresado lo suficiente en este maravilloso camino como para compartirles una entrada desde el corazón y sentirme con la convicción de cómo deseo retomar mi blog…

¿Las respuestas? Bien…

• Mi trabajo debe estar caracterizado por la libertad: la libertad de tomar decisiones, la libertad de sentirme cómoda con las personas que colaboro, libertad de transmitir mis pensamientos, libertad de sentirme en armonía con mi vida personal…
• Soy una Lorena que ama aprender, pero también enseñar… estas son dos características que buscaré integrar en lo que emprenda. Un hermoso mantra que ahora forma parte de mi vida diaria es que «todos somos maestros y alumnos». Inténtalo, te sorprenderás.
• Quiero ser una persona y profesionista en contacto cada vez más profundo con mi mundo interior. Aquí es donde encuentro las respuestas y el camino que mi corazón guía. Hay mucho que aprender, pero lo que he conocido ha sido increíble y estoy muy agradecida.
• Deseo que mi sello personal siempre sea ese toque que conecte mente y corazón. Para mí ambos son igual de importantes y creo firmemente que pueden coexistir con estabilidad. No puedo negar que algunas veces me gana lo racional de la mente, pero adoro el toque del corazón.
• Y aquí es donde llego al tema de vida personal / profesional. Es una materia en construcción. Ya he vivido el desequilibrio de dedicarme casi totalmente al trabajo (o totalmente, para ser sincera); he tenido la grandiosa oportunidad de entregarme tiempo a mí misma para fortalecerme como persona y, como bien he detectado en este proceso de autodescubrimiento, necesito vivir ambos lados antes de identificar mi punto medio. Es tiempo de dirigirme hacia allá y ser muy proactiva para alcanzar esa meta disfrutando el camino, que está lleno de bendiciones.
• Deseo que estos dos mundos (personal y profesional) puedan convivir en una Lorena que se permita compartir lo mejor de ella como profesional, pero también como ser humano con las personas que colaboren con ella. Hay momentos y hay lugares, me digo frecuentemente para recordar que aún cuando seamos unos excelentes profesionistas, las personas trabajamos con personas, construimos relaciones de confianza y es hermoso permitirnos aportar esa chispa o luz que nos caracteriza.
• Necesito que estos dos mundos convivan en armonía para recordarme en quién me he convertido a lo largo de este camino, que seguirá nutriéndose el resto de mi vida.

Por lo tanto…

Retomaré mi querido blog con libertad: libertad de escribir cuando me sienta inspirada; de compartir cuando encuentre algo de tanto valor que merezca ser compartido; con libertad de expresar con tanta mente y corazón como pueda en ese momento.

Un blog propio es un espacio tan personal, que no hay correcto ni incorrecto. Se trata de esparcir nuestras ideas y, ¿quién sabe? tal vez algo se le quede a alguien por ahí.

¿Cuáles son los pensamientos que guían tu camino? ¿Qué encontrarías si tomas un respiro para ti mismo?

Muchas gracias a las personas que lean esta entrada <3 gracias por confiarme un espacio en su día. Prometo esforzarme por aportarles valor.