¿Crees que es importante ser una marca con mente y corazón? Reflexiona un momento…
La respuesta es sí: todas las marcas se verían beneficiadas de mostrar por lo menos un poco de su corazón.
Generalmente comienzan operando con la mente, pues es el enfoque tradicional. Me refiero a planear y ejecutar pensando en procesos, estrategias que generen ventas, crear mayor necesidad en el mercado, producir más… todas estas acciones son completamente válidas y son necesarias para que la empresa continúe funcionando. Los reportes, logro de objetivos e indicadores en color verde son señales de éxito, pero ¿nos hemos puesto a pensar qué estamos dejando del otro lado? ¿cómo se siente nuestro consumidor?
Es hora de replantearnos el funcionamiento de estos procesos y ver a nuestros clientes como individuos con necesidades y preocupaciones que nosotros estamos para cubrir. Ellos confían en nuestro expertise, se acercan a nuestra marca para encontrar la respuesta y no les podemos fallar. Estamos ahí para conseguir un desenlace de ganar – ganar.
Reconoce las diferencias
Para diferenciar estos dos aspectos tan importantes que representan el logotipo de mi marca personal, les he preparado una tabla:
Una marca con mente y corazón, además de brindar un producto o servicio con características especiales y diseñado para un mercado que, de acuerdo con el estudio, presenta oportunidad, se preocupa por conocer a sus consumidores, identificando los factores que les importan y empatándolos con los valores que ofrece, para lograr una conexión en el horizonte emocional.
Encuentra tu dosis de equilibrio. Habrá que tomar en consideración la industria, el perfil del cliente y los objetivos de la empresa: si llegamos a un nivel que se pueda considerar pretencioso, lograríamos lo opuesto ahuyentando a las personas. Se trata de agregar un factor que nos distinga para que nos recuerden con una emoción positiva. Importante aclarar: el posicionamiento se lleva a cabo en la mente y corazón de todos los que nos conocen, no solo en los consumidores.
Valores clave para aplicar una estrategia de corazón a tu marca: honestidad, para detectar lo que somos capaces de ofrecer; empatía, para escuchar a nuestro prospecto o cliente, comprendiendo sus necesidades; y congruencia, para actuar en consecuencia a través del tiempo y de los puntos de contacto, fortaleciendo la imagen que decidimos posicionar.
Comenzar a ser una marca con mente y corazón
- Platica con tus clientes, pregúntales qué opinan de tu empresa, tus productos, por qué te eligen a ti, cómo les ayudas a solucionar sus problemas; cuál es su concepto de tu marca, con qué valores la asocian y si, en su opinión, existen otras marcas similares a ti.
- Analiza si estas respuestas corresponden con tus creencias personales y con tus esfuerzos de marketing. Trata de alinearlas con los valores de tu empresa, con lo que tienes identificado que te hace especial y encuentra los espacios en blanco, estas pueden ser oportunidades.
- Toma decisiones acerca del rumbo a seguir: ¿será el mismo o encontraste insights valiosos que te han hecho cambiar de opinión? Tal vez aquello que considerabas determinante en la decisión de compra no tiene tanto peso para tu cliente y encontraste nuevos criterios que sí.
- Aplica el conocimiento adquirido. Construye tu siguiente campaña aplicando este enfoque. Una buena práctica es realizar pruebas A/B para comparar resultados entre el modelo tradicional y tu nueva propuesta, lo puedes aplicar en tu estrategia digital. ¿El desenlace satisface tus expectativas? ¿Probarás algo distinto?
- Evalúa los resultados: imagina que luego de cierto periodo, entrevistas de nuevo a tus clientes. ¿Qué te dirían en esta ocasión? ¿encontraron diferencias? ¿son positivas y corresponden con tus aspiraciones, o su interpretación fue otra?
Recuerda que en el marketing vivimos de la prueba y error, ganando conocimiento sobre lo que no funciona y optimizando lo que sí con más pruebas, hasta llegar al punto que cumple nuestros objetivos. Como nos dicen en este artículo de Branzai: cuando queremos construir marcas equilibradas, debemos empujar ambos sistemas en la misma dirección.
Dale oportunidad a tu marca de generar emociones y permanecer en la mente de las personas. ¿Estás dispuesto a hacerlo?